Pastor relata cómo su hija sobrevivió a tiroteo en Oregon
Un pastor está hablando de la supervivencia de su hija y del hombre que le salvó la vida durante el tiroteo masivo en Oregon en el que nueve personas murieron tras ser consultadas por su fe.
Randy Scroggins, pastor principal de New Beginnings Church of God, utilizó el púlpito el domingo para compartir el testimonio de cómo, con su último aliento, Treven Anspach salvó la vida de su hija Lacey.
Durante el tiroteo masivo, el atacante Chris Harper Mercer les preguntó a los estudiantes acerca de su religión en el Instituto Superior Técnico de Umpqua. Lacey Scroggins, de 18 años, más tarde le dijo a su padre que Mercer le había pedido a un hombre que pasara al frente de la clase.
"Tú eres el afortunado. No vas a morir hoy", dijo.
Después de eso, Lacey escuchó un disparo cerca suyo y se dio cuenta de que Anspach había recibido un disparo y estaba sangrando. Anspach comenzó a rodar hacia ella.
"Sentí el cuerpo de Treven mientras se movía sobre el mío", Lacey dijo a su padre.
Lacey se hizo la muerta debajo del cuerpo de Anspach cuando Mercer le dijo que se levantara.
"La sangre de ese chico que cubría el cuerpo de mi hija, le salvó la vida", dijo Scroggins.
Cabe recordar que el objetivo específico de Mercer eran los cristianos, según varios testimonios de los sobrevivientes.
Antes de entrar en una cirugía, Anastasia Boylan dijo a su padre y a su hermano que el hombre armado entró en su aula. Le disparó a quemarropa al profesor. Otros fueron alcanzados, le dijo a su familia.
Todo el mundo en el aula se tiró al suelo.
El pistolero, mientras recargaba su arma de fuego, ordenó a los estudiantes ponerse de pie si eran cristianos, Boylan dijo a su familia.
"Y ellos se pusieron de pie y dijo: 'Bien, porque tú eres cristiano, vas a ver a Dios en casi un segundo'", relató el padre de Boylan, Stacy, a la CNN.
"Y luego disparó y los mató."
Apoyo espiritual para los afectados
A raíz del tiroteo en el Instituto Superior Técnico de Umpqua, un grupo de pastores y otros rescatistas se apresuraron a una zona de espera donde los sobrevivientes y sus familias estaban reunidas.
El pastor Jon Nutter, fue uno de los cerca de dos docenas de pastores locales que ofrecieron consejo a las personas afectadas por la masacre.
"Ellos habían estado esperando durante mucho tiempo, esperanzados y orando", recordó Nutter, el pastor de Hucrest Community Church of God. "La gente estaba llorando, gritando. Algunas familias estaban enojados. Los demás entraron en la negación y el shock."
Grant Goins sirve como pastor asociado en Roseburg Alliance Church.
"Es importante para nosotros que simplemente escuchemos", dijo. "No sabemos cómo lloran; queremos fingir que la muerte no vendrá. Le decimos a la gente que está bien llorar, dar a otros un abrazo y cantar 'Amazing Grace'".
Fuente: MundoCristianoTv